jueves, 28 de noviembre de 2013

Mi tarta 3 chocolates

El otro día hablando con una amatxu de la ikas salió el tema de que no le salía hacer la tarta de 3 chocolates tan habitual por la blogosfera y hacía tiempo que no la hacía así que me puse con mis ayudantes al tema.


Es una tarta taaaannn fácil.... ejem.... a quién no le salga es porque se ha saltado algún paso fijo. Ahí os va la receta:


Ingredientes:
150 g de chocolate negro
150 g de chococolate con leche
150 g de chocolate blanco
125 g de azúcar
750 ml. de nata
750 ml. de leche
3 sobres de cuajada
1 paquete de galletas (yo usé unas con un ligero sabor a coco, las campurrianas)
60 gr de mantequilla


Lo primero que necesitáis es un molde desmontable o un aro. Forrar la base con papel de hornear y luego pinzarlo con el aro. Mejor si es un molde sin marcas como el mío para que no os deje rayitas. Simplemente por la presentación porque buena estará rebuena igualmente.





Para la base:

Derretimos 60 gr de mantequilla y mezclamos con las galletas trituradas en un bol. Yo lo hice con una picadora hasta que veamos que esté como arena pero también se puede aprovechar a descargar estrés dándoles golpes dentro de un trapo o bolsa de congelación, jeje. Si vemos que queda muy densa se le puede echar una cucharada de leche.
Se esparce muy bien por toda la base del molde y se mete en el frigorífico para que se endurezca (hasta que tengamos la primera base de chocolate hecha).

Las capas:
 

Para preparar la primera capa, la de chocolate negro, mezclamos 250ml de leche (el sobre de cuajada lo disolvemos en un pelín de leche que de esos 250ml) con 250ml de nata en una cazuela a fuego lento. 

Los 150gr de choco negro partido a cachos y 75 gr. de azúcar los deshacemos sobre esa mezcla líquida con unas varillas. Removemos sin parar a fuego medio hasta que hierva (7-8 min. aprox.). Retiramos para echar la cuajada disuelta, removemos bien y de nuevo al fuego hasta que hierva. Debe quedar una mezcla homogénea. 
Vertemos la mezcla sobre la base de galleta con cuidado de no echar en el mismo sitio para que no haga agujero en la galleta por el calor.
Dejamos reposar. Hay quien lo deja simplemente fuera mientras se trabaja con la siguiente capa y hay quien, como yo, lo metemos ese rato a la nevera para asegurar que ha cuajado lo suficiente para volcar la siguiente capa. Cuidado al mover la tarta del sitio para que no se manchen los laterales.

Con la capa de chocolate con leche hacemos lo mismo que con  la anterior separamos 250 ml.de nata y otros tantos de leche junto con el chocolate con leche, un sobre de cuajada y 50gr de azúcar. Mezclar bien y volcar sobre la anterior capa con ayuda de un cucharón de sopa puesto del revés para ayudar a que no se mezclen los dos chocolates. Antes de volcar un truco para que no se resbalen las capas: rallamos la superficie con un tenedor sin meterlo mucho.

La última capa será la de chocolate blanco. Repetimos el mismo proceso pero (250 ml. de nata y 250de leche + 150 gr. de chocolate 
blanco+ 1 sobre de cuajada) pero sin agregar azúcar ya que cuanto más claro es el chocolate más dulce también.

Una vez cuajada se mete en la nevera hasta el día siguiente.



Yo le añadí unas virutas de chocolate blanco a modo de decoración y una hoja de chocolate con leche hecha con una hoja de árbol de la zona.

Para hacerla simplemente basta con tener una hoja (mejor si es firme, que se noten bien las nervaduras y que tenga rabito) y limpiarla a conciencia con alcohol. Derretir el chocolate a baño maría a fuego lento.
Con una picel pintar la hoja hasta dejarle una capa finita de chocolate. Dejar secar y darle otra capa más. Dejar enfriar unos minutos (2 ó 3) retirar y despegar con cuidado por el rabito.
Hice varias y es difícil que no se te requebraje por algún lado si es grande o si no limpias los bordes (se pega el chocolate y se rompe la hoja).
Quedan bien marcaditas. Creo que da mucho juego para decorar. Yo iba a poner varias pero unas se chafaron y otra no llegó a la tarta a tiempo porque cayó en manos de un enanín, juas juas. Habrá que volver a hacer más...
Y vosotras, ¿os animáis?